La mecánica de las amasadoras, desde los más pequeños hasta los más grandes, se caracteriza por grandes cojinetes montados sobre soportes desmontables, ejes de acero aleado y tratado térmicamente, poleas de transmisión de hierro fundido anticorrosión y correas de transmisión de alta calidad.

La universalidad radica en la posibilidad de amasar todo tipo de masas, desde las de menor hidratación hasta las extremas, con muy alta hidratación.

Cumpliendo con la normativa europea, las máquinas se suministran con una protección cerrada de PETG, equipada con resortes de gas para facilitar la elevación y el cierre controlado.

Las zonas de contacto con alimentos (MOCA), incluyendo tornillos, tapas y soportes, están fabricadas íntegramente en acero inoxidable, garantizando así higiene y facilidad de limpieza. La pintura de la estructura es de calidad alimentaria, extremadamente robusta y resistente a rayones accidentales. La carpintería interior responde a las necesidades de un mercado cada vez más atento a la robustez de las estructuras (espesores de chapa, soldadura robotizada y acabados que faciliten la limpieza de nuestras estructuras).